Presentación

Este es el blog de Carlos y Alicia, en donde os mostraremos las salidas a la montaña que realicemos solos o con nuestros compañeros y amigos.

martes, 4 de septiembre de 2012

Vía Ferrata Regina de Peramola

 
                       

Cuarto día de aventuras por Lérida. Hoy tocaba visitar la vía ferrata Regina, considerada por muchos como la mejor de todo el territorio nacional. Después de preparar las cosas, incluida mi cámara fotográfica que volvió a la vida, emprendemos al largo camino desde Senterada hasta Oliana, continuando en dirección a La Seu d'Urgell. En el kilómetro 149 encontramos una zona de aparcamiento a la izquierda, justo antes de un túnel. Como no se puede hacer al giro, seguimos unos 4 kilómetros para realizar el cambio de sentido.
Con la furgoneta bien aparcada empezamos a preparar las cosas, entre las que metemos 8 litros de agua para 5 personas, pues no queremos que nos pase como el día anterior en el que pasamos mucha sed. Por cierto que ese día en la zona de Ager, donde estuvimos de ferratas, se alcanzaron temperaturas de 40 grados a la sombra, según informaban los diarios locales.
Con un sofocante calor ya desde primeras horas de la mañana, comenzamos la aproximación hacia la ferrata por un sendero con marcas rojas que baja al torrente, para más tarde subir hacia un espolón. Una torre eléctrica nos sirve de guía. Continuamos hacia la pared que flanqueamos hacia la derecha, para llegar en unos 25 minutos al comienzo, en donde vemos gran cantidad de gente que comenzaba la subida en ese momento, dándoles  un poco de ventaja antes de  comenzar la subida.


El primer tramo empieza con pasos largos y verticales, que hubiésemos hecho en nada de tiempo, pero delante de nosotros llevamos a dos grupos más. En el primero de ellos vemos a un par de niños que lo van pasando realmente mal, incluso llegando a llorar. El atasco que van montando es monumental, por no decir la cantidad de piedras que nos iban tirando. En una de las muchas esperas oímos como avisan de la caída de una piedra, juntando los cuerpos todo lo que podemos contra la pared. A Fonso que va el primero le pasa rozando y yo que me encuentro junto a un pequeño árbol, tan solo puedo ver como la piedra del tamaño de un balón de balonmano golpea en el tronco, saliendo afortunadamente hacia el exterior de la vía. De haber continuado con la misma dirección casi seguro que golpeaba a alguno de nuestros compañeros. Después del susto y aún algo nerviosos continuamos hasta una pequeña repisa, en donde por fin este grupo nos dejó adelantarlos después de habernos hecho perder mucho tiempo.
Entramos en una canal con vegetación hasta llegar a una bifurcación. A la izquierda se va a la cima de la aguja y a la derecha continuamos hacia el puente colgante. Nosotros desechamos subir  a la aguja, por todo el tiempo perdido y encaramos el segundo tramo de la vía.


Superado el espectacular puente, que por cierto tiene algún cable roto, nos encaramamos por una larga pared vertical equipada con escalones muy salidos, hasta llegar a un corto rellano que nos conduce a un espectacular y aéreo espolón.


Superado este espolón tenemos un escape, aunque nosotros nos encaminamos a la izquierda siguiendo un sendero que nos lleva al tercer y último tramo. Este se inicia con una larga, vertical y aérea pared para más adelante realizar un espectacular y aéreo flanqueo hacia la izquierda.


El flanqueo nos sitúa entre dos paredes que ganamos, tras un pequeño desplome, realizando el peculiar Paso de la Fe.


Seguimos recorriendo varios tramos una vez superado el aéreo Paso de Fe, hasta un rellano en donde encontramos las dos variantes de salida, optando nosotros por la salida de la izquierda (la normal) un poco más fácil que le de la derecha (la original).


Más adelante llegamos a una plataforma en donde encontramos el buzón de registro, plagado de notas, y tras un último resalte damos por concluida esta magnifica y espectacular vía ferrata que nos causó gran impresión.


El regreso lo hacemos sin quitarnos el arnés, pues bajamos por el camino equipado Joan Nubiola, marcado con marcas rojas, que en una hora de descenso y tras pasar por debajo del Salt del Boter (cascada más alta de Cataluña) nos lleva  de nuevo al aparcamiento. A nuestra llegada y después de volver a tener que racionar el consumo de agua, alguno optó por darse un baño en las aguas del pantano, mientras otros preferimos regular la temperatura corporal con cerveza bien fría y una buena sombra. Por cierto, que teníamos que haber puesto un chiringuito, porque todos los que acababan la ferrata venían hacía nosotros pidiendo agua. Nosotros como buenos samaritanos repartimos lo que pudimos, y es que el calor había hecho agotar a todo el mundo sus botellas de agua.

        

Esta fue nuestra última actividad  en este viaje, aprovechando lo que quedaba de día para hacer algo de turismo e ir a hacer unas compras a Sort. El domingo 19 de agosto lo dedicamos para el viaje de regreso, que nos tomamos con bastante calma, regresando a nuestros hogares con un buen puñado de recuerdos y grandes momentos vividos.

3 comentarios:

  1. Y despues de dos semanas d relajacion este fin de a por el ( Gorgas Negras) q hay no creo q pasemos calor.

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  2. En breve voy a dar una vuelta por el norte para inspeccionar ferratas asequibles para clientes. Conocéis guías por la zona?

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  3. Aquí en Cantabria, en la zona de Unquera tienes www.aqua21aventura.com que la lleva Juan, compañero de curso de espeleologia hace unos años. Supongo que trabajara la ferrata de La Hermida aunque no creo que tenga problema en llevarte a las otras vías de Cantabria.
    También en la zona de Ramales de la Victoria existen numerosas empresas de aventura que trabajaran la ferrata El Caliz y El Risco.
    Espero haberte ayudado en algo. Si tienes alguna duda más mándame un mail. En mi perfil esta la dirección. Saludos.

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