RÍO LA H.ERMOSA
El fin de semana del 28 y 29 de junio nos desplazamos hasta Asturias para disfrutar de un intenso fin de semana barranquista. Habíamos quedado con Lolo y Mur el domingo para ir a mirar una posible apertura, así que decidimos cargar todos los tratos en la furgo, marchar para Demués (Concejo de Onís) y aprovechar la tarde del sábado para realizar un par de descensos de reciente apertura por Pablo Solares y sus compañeros de club.
Sin madrugar mucho, pues había currado de noche, emprendemos el camino hacia Asturias bajo un cielo bastante gris, aunque con una temperatura muy agradable. Según nos vamos acercando a nuestro destino el tiempo va empeorando, comenzando a llover con intensidad en algún momento, incluso llegando en pensar en dejar los descensos para otro día, pero decidimos ir a conocer la zona y llegado el momento decidir.
Llegamos a Demués y vemos una señal nada aclaratoria en la pista que se dirige a Soñín que no hacemos mucho caso, ¡tira un poco más! ¡aquí no podemos dar vuelta! etc, etc. Total, que nos plantamos en el cruce que va para el Cabañayu, lugar donde aparcamos el coche. Llegó el momento de decidir si entramos al cañón o no, al final nos animamos pues cae una ligera llovizna, que al poco de comenzar a cambiarnos se convirtió en fuerte aguacero haciendo la labor de ponerse los neoprenos bastante incómoda.
Animados por la excelente reseña, que habla de varios escapes, y que la lluvia bajó de intensidad, decidimos acercarnos hasta el cauce y una vez allí tomar la decisión final de entrar en el barranco o no. Continuamos caminando por la pista hacia Soñín hasta llegar a las cabañas de Sirviellu, en donde tomamos un camino que sale bajo estas cabañas y en 20 minutos nos llevó al comienzo del descenso, comenzando casi de inmediato con el primero de los rápeles.
Encontramos un caudal bajo, pero pronto una pequeña surgencia añade bastante agua, que convertía el agua en color chocolate, teniendo que prestar más atención en la progresión.
En la primera parte del descenso encontramos 3 rápeles y algún pequeño resalte fácilmente destrepables, realizando esta zona bajo una fina llovizna casi imperceptible, pues el bosque que encontramos en el río apenas dejaba que la lluvia nos cayera a nosotros.
Superado este primer tramo deportivo el barranco se abre y tenemos por delante un largo trecho rodeados de una vegetación exuberante hasta la segunda parte, en donde encontramos otros 4 rápeles.
El final de este bonito descenso lo marca la preciosa cascada de El Piponón, en donde pasamos un largo rato disfrutando del lugar.
Acabado el descenso, continuamos hasta encontrar a la derecha la salida de la Riega H.unfría (que sería nuestro siguiente objetivo). Desde este punto, un sendero un poco difuso entre enormes helechos (a mano derecha) nos llevó a la pista de Soñín (25 minutos) a escasos metros de donde teníamos el coche, aprovechando para recuperar fuerzas antes de dirigirnos hacia la Riega H.unfría.
RIEGA H.UNFRÍA
Desde el coche nos dirigimos hasta las cabañas de Cacavieya, desde un sendero en la parte baja nos llevó en 5 minutos a la cabecera del barranco.
De este barranco muy poco que mencionar, tan solo tiene un par de cascadas bonitas y poca cosa más.
En media hora lo descendimos, sirviendo como complemento para el Río H.ermosa y pasar una buena jornada.
Llegamos al final del descenso y volvimos a coger el sendero utilizado en el retorno de H.ermosa, que nos llevó al coche para ahora sí quitarnos el traje de faena.
Felicitar a los aperturistas por estos dos nuevos barrancos, que como bien dicen, sin ser cañones espectaculares el conjunto de la actividad es entretenida y no desmerece. Por cierto, fuimos muy respetuosos con el entorno y sobre todo con el estilo de instalación de los aperturistas, y eso que alguna reunión nos costó encontrarla, jeje.
Saludos, compañeros! "Presta" saber que otros barranquistas descienden los barrancos que uno ha divulgado (vosotros mismos habréis tenido la misma sensación, seguro), y más, si cabe, verlo en uno de los blogues por los que se pasa con cierta frecuencia. Me ha sorprendido de las fotos que en los dos primeros rápeles prácticamente fuese seco, y sin embargo en el resto del barranco el caudal fuera semejante al que nosotros nos encontramos; es algo bien curioso. Siento que os costase encontrar algunas de las instalaciones, exprimimos al máximo los anclajes naturales. Desde luego se podría mejorar para que algunos rápeles fuesen por el agua y el descenso fuese más lúdico; yo con lo del respeto por el estilo de instalación me refería más a esa tendencia de algunos de poner chapas en cada resalte, lo que creo que llega a restar compromiso e interés al barranco.
ResponderEliminarY -cómo no- mi enhorabuena al equipo por la nueva apertura, en un lugar realmente sorprendente. A ver si "entamamos" alguna juntos. Saludos!
Hola Pablo, gracias a vosotros por compartir la información, así pudimos conocer este bello rincón.
ResponderEliminarSi es curioso lo de encontrar el barranco casi seco en los dos primeros rápeles y más tarde que aumentara el caudal. Nos dimos cuenta de que en una zona una vez superado el primer rápel y un primer resalte aparecía una surgencia casi inapreciable. Nos dimos cuenta porque el agua salia turbia.
En cuanto a la instalación, el barranco estaba perfecto, tan solo nos costó encontrar alguna reunión, pero nada grave,jeje.
Por nuestra parte encantados de poder barranquear juntos.
Saludos.